Superadas las compras del Black Friday y el Cyber Monday, llegan las Navidades. ¡Las de toda la vida! Para muchos, diciembre es un mes de pagas extra, pero también de gastos asociados a cenas, celebraciones, viajes y, especialmente, a regalos que pueden descontrolar nuestro bolsillo.
Porque nunca está de más tener a mano el manual para prevenir lo que aún está por llegar, aquí tienes algunos consejos para que llegues a Navidad sin la cuenta en números rojos. ¡Toma nota!
Decálogo para sobrevivir económicamente a la Navidad
- Previsión económica
Lo primero, y muy importante, es hacer una lista previa de nuestros planes, para visualizar lo que realmente necesitamos, y marcar nuestras prioridades. A partir de ahí deberemos trazar un presupuesto. Una estrategia financiera ideal para evitar dejarnos llevar por las emociones y las compras compulsivas de estas fechas.
- La libreta nunca falla
Podemos anotar todo aquello que vamos gastando. De esta manera, sabremos en qué se nos va el dinero. Si además hemos conseguido una oferta o promoción, siempre podemos comparar qué nos hubiéramos gastado realmente. ¡Un buen estímulo para animarnos a seguir ahorrando!
- La ecuación de nuestra economía
Si sumamos los gastos fijos, las deudas, el ahorro y le añadimos los regalos de Navidad, sabremos exactamente a cuánto ascienden los gastos totales. De esta forma, si a nuestros ingresos le restamos estos gastos totales, conoceremos realmente cuál es nuestra capacidad de pago.
- 12 meses, una causa
¿Por qué no distribuir el gasto a lo largo de un año? Si tenemos claro que vamos a realizar una inversión importante en estas fechas, un buen método es ir apartando una cantidad regular con el fin de alcanzar nuestra meta sin que eso supongo un gran impacto de golpe.
- Poner nombre al regalo soñado
Si se trata de visualizar una meta, ¿por qué no ponerle nombre? La apertura de una cuenta destinada a conseguir nuestro objetivo es un método que da grandes resultados. La motivación del reto dejará atrás la impulsividad de las compras navideñas.
- En tarjeta mejor que en efectivo
Según datos del Banco de España, el uso de la tarjeta se ha multiplicado en los últimos años. El dinero de plástico se ha convertido en un aliado por la comodidad de no llevar efectivo —sobre todo, cantidades elevadas en estas fechas— y porque el pago con tarjeta de crédito o débito nos permite controlar los gastos al detalle y fraccionar el pago en cuotas más cómodas.
- Evitar el gasto hormiga
Si se hace con previsión, un buen método para llegar a las Navidades con una cantidad extra es dejar atrás gastos prescindibles (comer siempre fuera, cafés, postres, tabaco, etc.) que hacen mella en nuestra economía diaria.
- Resistencia al merchandising y el neuromarketing
Más que nunca en estas fechas, los comercios potencian sus técnicas de merchandising —distribuyendo estratégicamente artículos y espacios— y de neuromarketing, la disciplina que estudia cómo reaccionamos los consumidores sensorial y neuronalmente ante distintos estímulos. Está en nuestra mano, y en especial en nuestro bolsillo, ser más o menos resistentes a dichos estímulos.
- Más allá de la compra compulsiva
Los psiquiatras del siglo XIX Emil Kraepelin y Eugen Bleuler hablaron por primera vez de la oniomanía, que procede del griego onios —aquello que está en venta—, y la asociaron como una manía o locura. Evidentemente, se trata algo extremo como la falta de autocontrol ante el consumo y, sobre todo, el sentido de culpa después de comprar. Nunca está de más tenerlo presente. ¡Que tus compras no se te vayan de las manos!
- Un asesor en la familia
Evidentemente, la planificación a corto y largo plazo de nuestros ahorros será mucho más fácil si contamos con un asesor asesor financiero. Toda una garantía para gestionar nuestras cuentas sin llevarnos sobresaltos y pasar unas Navidades tranquilas. ¡Déjate aconsejar por un verdadero experto en las finanzas personales y ahórrate disgustos!
Ahora que ya conoces algunas herramientas para controlar el gasto… ¿a qué esperas para ponerlas en práctica?
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