Ser mujer es más difícil que bautizar a un gato. Primero, porque nos cuesta el doble acceder a puestos de mando. Y segundo, porque al permanecer históricamente en un segundo plano, se nos ha impuesto la obligación de tener que estar siempre hechas un pincel y, además, ser madres modelo. A pesar de nuestros esfuerzos por demostrar que tiramos del carro en el trabajo tanto como los hombres, que no somos solo una cara bonita que se dedica a traer descendencia a este mundo, tenemos que seguir lidiando con la falta de conciliación para poder desarrollar mínimamente nuestra carrera. Hacer malabares con nuestra vida profesional y familiar constituye nuestro día a día. Que levante la mano la que no acabe el día harta de ir p’acá y p’allá, con los niños a cuestas y la casa colgando, como dice Bebe en una de sus canciones.
Tener un buen plan de jubilación es complicado para las mujeres
“Si comienzas a ahorrar desde ya, dentro de unas décadas podrás disfrutar de tu momento vital más tranquilo”Sí, amiga. Para nosotras todo es más complicado. La ayuda que recibimos es escasa y el reconocimiento, mínimo. Encima, la poca estabilidad económica no ayuda en lo más mínimo a la hora de poder recibir un salario más justo. Si te paras a imaginar qué será de ti en unas décadas, seguro que piensas que asegurarte unos eurillos con los que poder viajar con el IMSERSO parece una tarea titánica. ¡No me extraña! Las pensiones del futuro penden de un hilo, el cual se está tejiendo de forma incierta a día de hoy. Un panorama prometedor, ¿verdad? Pues espera, que todavía hay más… ¿Sabes que las mujeres, de media, vivimos entre cinco y siete años más que los hombres? (Lo siento, chicos.) Esto nos va a obligar a estirar, aún más, lo poco que consigamos haber ahorrado para ese momento. En fin, que si una se pone a sacar conclusiones, llegar a vieja con un “colchoncito” de dinero parece una tarea diseñada solo al alcance de Wonder Woman, no de una mujer normalita, con un sueldo y un hogar normalitos.
A pesar de los malos augurios, si algo nos caracteriza a las mujeres es nuestro don para administrar con cabeza. Al menos, eso es una gran ventaja que podemos utilizar en nuestro favor. Y, como el tiempo pasa volando, aparcar las cosas para que se preocupe y las resuelva, deprisa y corriendo, tu “yo” del futuro no es un gran plan, la verdad. Lo más sensato es empezar a cubrirse las espaldas cuanto antes. ¿De verdad no crees que debes empezar a ponerte las pilas? Sé que este tema te causará pereza. Incluso estarás pensando que todavía queda tiempo para organizar esa etapa en la que pasarás a formar parte del Club Sénior… Pero si comienzas a resolverlo desde ya, dentro de unas décadas podrás disfrutar de tu momento vital más tranquilo. Nunca es tarde para preparar un plan de jubilación adecuado a cada una de nosotras.
“Las mujeres, de media, vivimos entre 5 y 7 años más que los hombres. Esto nos obligará a estirar más lo poco que hayamos ahorrado para ese momento”
Las dudas en la jubilación de las mujeres
Se trata de una problemática que debe desaparecer. Los estereotipos nunca han ayudado. Quizá haya llegado la hora de romper con ellos y de actuar de manera diferente a lo que se espera de nosotras. Así que, en vez de comprarles algo a tu marido, tus hermanos o tus hijos, ¿por qué no guardas ese dinero para asegurar tu futuro?
No me des las gracias ahora. Dátelas a ti misma cuando estés tomándote un mojito tumbada en primera línea de playa, celebrando tu setenta cumpleaños.