LinkedIn es una red profesional que tiene como objetivo conectar a los profesionales de todo el mundo con la finalidad de hacerlos más productivos y exitosos. Uno de nuestros principales objetivos consiste en ayudar a los usuarios a que hagan un mejor uso de su red ofreciéndoles la posibilidad de conectar e intercambiar información con sus contactos.
En LinkedIn, los usuarios pueden encontrar trabajo a través de un contacto, de una Company Page donde las empresas suelen publicar sus ofertas o a través de los Grupos de LinkedIn donde los miembros pueden anunciar ofertas de empleo.
Pero además, LinkedIn ha creado distintos productos que ayudan a reclutadores y headhunters a encontrar el mejor talento en una red global de más de 200 millones de usuarios en todo el mundo y 5 millones en España.
Cada uno de los profesionales miembros de Linkedin tiene que encontrar la mejor manera de optimizar su presencia en la Plataforma y su utilización de la Red. En ese sentido, Linkedin nos ayuda a ser más eficientes en nuestro trabajo.
Para ello, lo primero que hay que hacer al darse de alta es preguntarse cuáles son mis objetivos y cuál es la estrategia que me va a ayudar a conseguirlos. No tendrá los mismos objetivos un headhunter que un abogado, una empresa pequeña que una gran multinacional… pero todos tienen su cabida en Linkedin.
La definición de la estrategia puede hacerse de la siguiente manera:
– El Perfil. Nuestro perfil es nuestra imagen virtual en Linkedin, aquello que mostramos al resto de profesionales. Ha de ser, por tanto, todo lo atractivo que podamos. Tenemos que conseguir que todo aquel que visite nuestro perfil encuentre un valor al hacerlo. ¿Qué podemos aportar al resto de miembros? La respuesta dependerá de nuevo de los objetivos que nos planteamos al inicio. Por ejemplo, si busco trabajo tendré que conseguir que los profesionales que ofrecen oportunidades laborales encuentren mi perfil atractivo en ese sentido. Si lo que busco es ampliar mi red de clientes, tendré que enfocarlo adaptando el contenido de mi perfil a ese fin. Los perfiles corporativos (de empresa) funcionan de la misma manera. Hay que plantearse las siguientes preguntas: ¿quién soy? ¿qué ofrezco? ¿qué busco? Teniendo en cuenta siempre que Linkedin es una red social profesional. Del mismo modo que no voy con traje a una fiesta y no voy en bermudas a una reunión con un cliente, no pondré el mismo contenido en mi perfil de Linkedin que en el de otras redes sociales.
– La Red de Contactos. Piensa en cantidad, pero también en calidad. Cada contacto que tengas tiene que aportarte valor. Revisa tus objetivos: contacta sólo con aquellos profesionales que te puedan ayudar a encontrar trabajo, que puedan estar interesados en lo que tu ofreces, que te puedan aportar conocimiento y experiencia en la materia que trabajes, etc. dependiendo del caso. Utiliza el sentido común, no contactes con gente que no conoces o que no puedas aportarles valor. Eso te perjudicará en tus objetivos en vez de acercarte a ellos. Diseña una estrategia. Por ejemplo, si quieres trabajar en la empresa X, aplica a sus ofertas de trabajo o pide a alguien que conozcas que te recomiende al Responsable de Selección, pero no “abordes” directamente a esa persona, puede ser contraproducente. Si vas a intentar contactar con un potencial cliente, asegúrate de que realmente le vas a aportar valor y arguméntalo correctamente al contactar con él para que la otra persona lo perciba así. Ponte en la piel de los demás y pregúntate ¿qué harías en la misma situación en el mundo offline? La necesidad ya estaba ahí, Linkedin sólo facilita el camino.
– Actividad. Una vez diseñado mi perfil y creada mi red de contactos (recordad que ambas cosas son dinámicas y evolucionarán con el paso del tiempo) tengo que invertir tiempo para obtener el rendimiento esperado. Para ello, empezaré a participar en las distintas Áreas que Linkedin ofrece: Grupos de Conocimiento, Ofertas de empleo, Noticias relevantes según mi actividad profesional, Sites de Empresas que me interesan, etc. La regla número uno es: piensa primero en lo que yo puedo aportar antes de esperar que los demás me aporten. El éxito de las redes sociales depende en gran parte de esto; cuanto más doy, más recibiré.
Por último, desde LinkedIn siempre intentamos ofrecer una serie de consejos y sugerencias útiles para que cada usuario pueda sacar el máximo partido de su perfil, en realidad solo 9 minutos al día son suficientes para darle un impulso a tu carrera a través de LinkedIn, y no es mucho, es aproximadamente el mismo tiempo que tardas en maquillarte, tomarte un café, o esperas el bus cada mañana.
- Añadir una foto para que la gente pueda identificar fácilmente
- Completar el resumen de tu perfil destacando en tus propias palabras en qué has estado trabajando y en qué trabajas, qué áreas son tu especialidad, cuáles son los temas que te interesan, etc.
- Crear una buena red de contactos, ya sea mediante la inclusión de los contactos de correo electrónico o utilizando la herramienta de “Gente que probablemente conoces”
- Añadir tu formación incluyendo aquellas cualificaciones relevantes para tu carrera profesional
- Añadir tu experiencia laboral actual y anterior para que la gente pueda conocer tu experiencia hasta la fecha. También añadir los trabajos no remunerados, como tareas de voluntariado que hayas realizado ya que revelan muchas capacidades y habilidades de la persona
- Solicitar recomendaciones de aquella gente que ha trabajado en el pasado contigo para poder darle a tu perfil una mayor credibilidad
- Participar en los Grupos de LinkedIn para estar en contacto con profesionales con intereses similares, y poder intercambiar con ellos experiencias e informaciones sobre novedades o temáticas que puedan resultar de interés para el desarrollo de tu carrera profesional.
- Hacerte seguidor de aquellas empresas que te interesen para estar al corriente de sus novedades, sus negocios, etc.
Enterprise Relationship Manager Iberia of Linkedin